El teórico consistirá en un test, que en el futuro se realizará por ordenador. En cuanto al práctico, la duración de la prueba será como mínimo de 25 minutos para los permisos A1, A2, B y BTP y de 45 para los permisos restantes, excepto los de las clases AM y A, que no requieren prueba de circulación.
Las principales novedades son la conducción autónoma y el protocolo de calidad. La prueba queda estructurada en las siguientes etapas:
1. Recepción del aspirante e identificación.
2. Comprobaciones previas. Antes de iniciar la prueba, se pedirá a cada aspirante que realice alguna verificación o comprobación con carácter aleatorio de una serie de elementos del vehículo: niveles, presión o dibujo de los neumáticos, funcionamiento del limpiaparabrisas, etc.
3. Conducción autónoma. Se entiende por tal la realizada por el aspirante de forma independiente. Su duración será de 10 minutos; ocupará la parte inicial de la prueba de circulación. En ella, el examinador realizará alguna indicación como: «inicie la marcha y vaya a …».
4. Conducción guiada. El resto de la prueba seguirá siendo de conducción guiada con los actuales criterios de calificación. La única novedad es que, durante el tiempo de la prueba, se evaluará de manera global la realización de una conducción eficiente.
5. Cuando finalice la prueba, el examinador comunicará al aspirante, en presencia únicamente del profesor, el resultado de la misma.