1. Hablar con ellos, mostrarles su cariño y dedicarles tiempo haciendo algo juntos, prestando atención a sus posibles cambios de conducta.
  2. Transmitirles que no son los culpables de la separación y tampoco depende de ellos una posible reconciliación.
  3. Mantener los mismos esquemas educativos para transmitirles seguridad.
  4. Favorecer las relaciones de sus hijos con la familia del otro progenitor, siempre que no sean perjudiciales.
  5. Evitar que los menores estén en mitad de cualquier disputa.
  6. Evitar descalificaciones del otro progenitor delante de los menores.
  7. Evitar utilizar a los menores para obtener información del otro progenitor.
  8. Evitar utilizar a los menores como como confidentes.
  9. Mantener la mejor relación posible con el otro progenitor.
  10. Ser sincero con los menores, transmitiéndoles la máxima confianza.